Tras una prestigiosa trayectoria internacional, el artista Cristóbal regresa a su isla natal. Pero esta se encuentra sometida a proyectos de edificación indiscriminada por parte de promotores inmobiliarios que están resueltos a transformarla en un destino turístico de ensueño. Decidido a preservar su trocito de lava perdido en mitad del océano, Cristóbal utiliza su fama para iniciar un plan de resistencia insólito: hacer de la isla una obra de arte Pero... ¿tiene el artista el control sobre su creación realmente? Esa es la pregunta clave que el inspector Ramírez se plantea cuando Cristóbal es hallado muerto en un extraño accidente de coche.

La vida es un viaje, no un destino . En un pequeño pueblo del corazón de Francia, Abel vive solo con su perro, sus dos vacas y sus ovejas. Nunca ha salido de su pueblo. Sin embargo, toda su vida ha soñado con recorrer el mundo y ha imaginado viajes a lugares lejanos. El septiembre próximo, a pesar de su edad, Abel ha decidido ir a Etiopía. Un libro divertido, conmovedor y, sobre todo, formidablemente bien construido. El viaje de Abel es una obra contemplativa que esconde inesperados momentos de emoción, y silencios que subliman la capacidad de una página de cómic para conmover al lector. La crónica de una vida conmovedora, llena de ternura y poesía. ¿Quieres conocer el mundo? Cierra los ojos.

Para enfrentarse a un desastre natural es necesario contar con la fuerza de la naturaleza. Madeleine es ambas cosas. Troumesnil, Costa de Alabastro, Normandia. Carcomido por el mar y el viento, el acasntilado retrocede cada año de manera inexorable, llevándose consigo el paisaje y sus viviendas. El alcalde del pueblo ha logrado proteger a los habitantes más amenazados. A todos menos a una nonagenaria que, una vez más, opone resistencia a las autoridades municipales. Madeleine quiere seguir viviendo con su gato y con el recuerdo de su esposo en SU casa. Madeleine se niega a ver el peligro. Y con razón: Madeleine es ciega de nacimiento. Bruno Duhamel confirma su talento como narrador creando una conmovedora historia y manejando con maestría las emociones. Una divertida obra a la vez que seria y melancólica.

Troumesnil, Costa de Alabastro, Normandía. La casa de Madeleine está al borde del abismo. El alcalde también. Desde que intentó desalojar a la más anciana del lugar, la trayectoria del alcalde ha sido un auténtico infierno. Desde que los medios de comunicación acapararon la historia, Madeleine se ha convertido en un icono y el acantilado en un lugar de peregrinación. Los turistas acuden al acantilado, desafiando las normas de seguridad, y la oposición está decidida a sacarle partido. Cuando una tragedia se cobra su primera víctima, el futuro de Troumesnil se tambalea. Pero aún permanece un vestigio del pasado... Y muy pronto Madeleine cumplirá 91 años.